En Vargas la Navidad es con parrandas
Misas de aguinaldos, hallacas y licores artesanales no faltan en el Litoral Central

En los urbanismos de Guaracarumbo celebran con aguinaldos y parrandas las fiestas decembrinas (Cruz Sojo/Especial)

Foto: Parranda Consejo Comunal Guaracarumbo Sector II

La Guaira.- La musicalidad es un aspecto irrenunciable en la personalidad del pueblo varguense. Es por eso que no es de extrañarse que la tradición más popular en los días previos y posteriores de la llegada del Niño Jesús sea la organización de parrandas, misas de aguinaldo y patinatas en los distintos sectores del estado costero.

"La parranda y el aguinaldo forman parte de la historia musical guaireña. Desde Naiguatá, Carayaca y el sector El Cardonal, de La Guaira, han salido agrupaciones, temas musicales y la costumbre de celebrar en la calle, lo que ha quedado en el ideario local" explica el docente y compositor varguense Carlos Méndez, quien rememora las huellas de Alegrías de El Cardonal, Voces Risueñas de Carayaca, Viva Venezuela, La Sardina de Naiguatá, La Calenda y Tarraya, entre otras, así como la virtuosidad de Ricardo García, el popular "Cacharrita", quien escribió el infaltable "Fuego al cañón".

El aspecto que mayor destaca Méndez en la parranda navideña varguense es la espontaneidad. No existe una hora o una fecha precisa para que la parranda salga hasta el amanecer. Las circunstancias fortuitas la impulsan y el "vente tú" es común a la hora de reunir a músicos y cantantes.

Sin embargo la tradición local se ha visto empañada con la inseguridad. Las misas de aguinaldo han cambiado de horario, así como las patinatas. Las primeras se han desarrollado entre las 7 y 10 de la noche, mientras que los patines, patinetas y bicicletas tienen espacio los domingos en la tarde, cuando comunidades como Macuto, La Soublette, Tanaguarena, Naiguatá y Guaracarumbo trancan una calle para el disfrute.

La cena tradicional no falta No sólo la música marca la fiesta de Nochebuena en el Litoral Central. Si bien la mesa no muestra mayores variantes, pues luce hallacas, pan de jamón y pernil o pavo, el tema de las bebidas es otra cosa. "Al guaireño le gusta preparar lo que toma. Sea guarapita, leche de burra o licor de ponsigué o de uva de playa, las bebidas espirituosas caseras superan con creces a cualquier licor importado" agrega el vecino Néstor Briceño, quien desde hace 15 años vive de la venta de bebidas artesanales en época decembrina.

Otro infaltable es la compra de guarapita de guanábana o parchita en el Bar Miami, en el casco colonial de La Guaira, pero no para la cena, sino para la festividad del 25, ya sea en una playa o en un río, porque esa es otra de nuestras costumbres: la llegada de Santa o del Niño Jesús es con un sancocho o con una parrillita, con la familia que llega de visita o con los amigos, pero al aire libre. Con la orilla del mar tan cerca es imposible que sea de otra manera" explica la matrona Cándida González, quien este 24 espera reunir en su casa a su prole de 7 hijos y 21 nietos.

Nadeska Noriega ÁvilaESPECIAL PARA EL UNIVERSAL